"Vivimos al borde del sentido."

8.27.2015

Francisco 27.8.2015 (10.56am)

Hoy soñé contigo de nuevo y disfruté cada milímetro de cariño que me dabas, porque era un sueño y no habían secretos detrás de tus palabras, todo era honesto y sentido.

Apoyabas tu cabeza de lado sobre mi pecho y escuchabas mi corazón mientras te acariciaba el pelo, recién te lo habías cortado. Y aunque me dejabas la polera llena de cabellos que picaban, todo era perfecto, hasta el clima. Parecía el primer día que estuve en Frankfurt, un calor húmedo perfecto, no tan húmedo, no tan caluroso,  no tan frío. La luz también era perfecta, el sol no me encandilaba ni acaloraba. Todo era perfecto.
Incluso nuestras manos se entrelazaban y soltaban en un vaivén de caricias, sin secretos extras, sin malos sentimientos detrás. Sentí lo que sentía al principio contigo, un cariño genuino, puro y nuevo. Nada se escondía detrás del sentir, no había equipaje que arrastrar como una bomba de tiempo.

(Quizás eso era lo que nos faltaba al final.)

En mis entrañas sentía el deseo de quererte de nuevo, mi diafragma me daba un poco del agujero negro y mi corazón latía roto pero con fuerza, esperaba que te dieras cuenta de eso al tener tu cabeza apoyada en mi, pero desperté. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario