¿De qué sirve todo esto si al final, voy a morir igual?, ¿Qué va a ser de mi legado?, ¿Voy a tener legado alguno?, ¿O tengo que resignarme y convertirme en un muerto más? Tengo miedo de eso.
Pienso en todas esas personas que murieron y nadie supo de ellas. En todos esos que acompañaron a los personajes memorables en sus luchas, pero fueron olvidados al escribir el cuento. Me aterra.

¿Para qué sirve la vida?
Para nada. Es un puto adorno en el escritorio que no puedes tirar a la basura porque tiene valor emocional.

¿Y si ya estamos atrapados en esta porquería efímera, por qué tenemos que hacer lo que la sociedad nos dicta?
Trabajar para hacer a otros ricos sin poder nunca disfrutar de las maravillas que nos da la naturaleza, sin poder aprender de nuestro cerebro, sin sentir con todo lo que nos permita nuestra biología.

Estar aquí, seguir aquí, sólo serviría si puedo hacer que la vida sea mejor para los que vienen. Si no, mi existencia no tiene razón alguna.
Seguir aquí serviría si me amaran, mi madre, mis hermanos, mi padre, mis amigos, los humanos, pero como no, mi existencia no tiene razón alguna.