"Vivimos al borde del sentido."

5.05.2018

Última vez.

Vengo una vez más, sólo a despedirme.

Tanto tiempo ha pasado y los cambios se han hecho tan notorios como un rascacielos en medio de una granja, y éste lugar sagrado de depósitos emocionales, psicológicos y factuales se convierte en una hermosa y trágica caja de recuerdos.
Hace ya casi un año que mi vida cambió radicalmente y mantenerme atada a lo antiguo no es más que un peso innecesario, uno que debí cerrar quizás, junto a todo lo que cerré estando aún allá. Pero no lo hice y no me arrepiento tampoco, sólo es.

Hoy se cierra ésta etapa y empieza una nueva, se queda la cajita de recuerdos que espero no sea eliminada por google, pero si lo es, no pasa nada, se va igual que las memorias.

Gracias por todos estos años de lectura queridos amigos (los dos y casi tres que leyeron esto constantemente alguna vez). El que esto se acabe, no significa que ustedes lo hagan, si no que se empieza algo nuevo, probablemente en otra plataforma, probablemente más organizado, probablemente... Puedo seguir dando posibilidades, pero no quiero dar tantas vueltas.
Espero saber pronto de ustedes.

Muchísimo amor,
Daniela.

2.23.2017

Ser madre.

Si con apenas 10 años te conviertes en madre, es entendible que lo único que tengas en el fondo de tu corazón, bien enterrado y escondido, sea un dolor tan grande como el universo.
Es entendible que te sientas insegura y aterrada, que busques ser contenida por otros, pero ese dolor y ese miedo no se van. Y no se van a ir ni con el amor más fuerte.

Es una cárcel. Desde hace 13 años vengo cuidando a una niña de 7, que sigue teniendo los mismos 7. Una niña que siempre tiene la razón, que todavía culpa a sus padres por todas las decisiones que tomó mal, que no es capaz de soltar las cosas, que su orgullo es más grande que su casa y que es dueña de todo lo que le rodea, lo monitorea y lo controla sin aceptar que las cosas se añejan, se rompen y mueren.
Tiene sentido que sus otros dos hijos vivan tan lejos.
Tiene sentido que su hijo estuviera sumido en tal depresión.
Tiene sentido que hasta yo me esté volviendo loca.

Tiene infinito sentido que a pesar de todos mis intentos por ser más feliz en el día a día, siga sintiendo que me hundo y me ahogo.

Pero no me importan las razones. Yo dejo ir, perdono, y acepto mis errores y mis culpas. Yo lo único que quiero es dejar de ser la madre de mi madre, quiero que me escuche y me entienda sin dar su monólogo a la defensiva con saltos temporales de cosas que pasaron hace 20 años.

Extraño a mi mamá. Pero soy una niña rota más, en este planeta de niños vacíos. Soy un dolor más en este universo, soy otra energía sin contener, soy otra más, y nada más.

Extraño tanto a mi mamá. 

22-23 de febrero, Cristián.

Ojalá no me hubieras tocado. Pero si ya estabas en esa, ¿para qué te fuiste? Podrías haberme hablado. El verte partir dejó un vacío. Ojalá sólo nos hubiéramos quedado abrazados, pero tantas veces te has confundido, tantas veces me has confundido, que ya no sabía qué esperar.

Si ya estabamos ahí, quizás debimos al menos disfrutar hasta el final.
A veces pienso que la única forma de cerrar nuestro ciclo es esa misma.

Hace tiempo que no siento tanta culpa, porque lo disfruté. Fue tan cercano como si siempre hubiera pasado, como si hubiera tenido que pasar, como si para terminarnos y ser completos tuviera que pasar. Como si nos conociéramos como nadie más.
Y lo peor es que no pasó nada, pero pasó todo.
Eres infinito en mi corazón y ahí mismo te vas a quedar, pase lo que pase.


Tienes tanta influencia en mi que cuando lo veo, me mata. Estaba pensando en adelgazar, sólo por ti. El problema es mío claro.

Todo lo que toco muere, a veces hasta se pudre. Perdóname. 

2.15.2017

Las malas decisiones.

Dime, ¿para qué?
No voy a repetir el mismo error dos veces, aunque me encantaría porque me encantas. Pero eso de parar de hablarme de la nada ya lo viví una vez, y no voy a dejar que pase de nuevo. Ya ni me acordaba de ti, pero volviste, ¿para qué volviste? Más encima justo ayer que te había pensado por horas, porque salí con otro, porque fui a tu lugar, porque anduve por los lugares donde anduve contigo.
Me aburren las coincidencias porque me encantan, y me encantas. Pero quiero creer lo que dijiste, '¿no crees que debe ser así de fácil?', espero que tengas razón porque me siento sola y me aterra pensar en que voy a estar mucho tiempo más sola, y mucho más sola. 
Me gustan tus defectos porque no me gustan, pero me encantan. Pocas veces logro pasar por alto esos detalles, lo normal es que me molesten tanto que dejo de intentarlo, pero contigo todo era lindo.

Pero como decía, a pesar de mi corazón, a pesar de las mariposas, a pesar de la emoción que siento cuando me acuerdo de ti, no voy a volver. No voy a repetir el error, voy a dejarte ir. 
Te quiero tanto, pero voy a dejarte ir.

La perra con corazon

Es gracioso ser una perra sin corazón pero con un corazón infinito. No sé si me explico.

Tenía un amigo, y me lo comí y fui su amiga y él quería más pero siempre seguimos siendo amigos. Después tuve un amigo y él me quería comer, pero yo me comí a su hermano y lo hice llorar. Después de eso tuve otro amigo, y él tenía polola, pero nos comíamos igual. Al tiempo estuve más seria con un cabro, pero a los dos meses, me comí a uno de sus mejores amigos y después (ésta es la peor parte) terminé con el amigo para volver con el serio.
Y ahí fue serio por años, pensé que ya no tenía en mi eso de andar matando gente, pensé que sólo podía enamorarme y mantener relaciones estables, pero no, sigo siendo la misma perra del corazón infinito.

Probé con una chiquilla, y ella me quería pero yo no a ella, y la hice llorar por montones. Después estuve con su ex pololo, y me quedé con él un par de meses porque tenía un pene muy grande, sólo por eso. Y los hice llorar a los dos. Después de eso estuve enamorada en año nuevo, y se me pasó tan rápido como lo fuerte que fue. Y entonces casi estuve con mi otro amigo, el que mencioné al principio, y hasta fantaseé con un trío entre él, su polola y yo, después pensé en que sería una mala idea porque ellos son pololos, y se me ocurrió meterme con cada uno por separado, pero la polola no parece muy abierta de mente, aunque no la conozco mucho. Y bueno pues ayer salí con otro a tomar al medio kilo, lugar donde trabajó el amor de año nuevo y mi amor de octavo, y sigo siendo una perra, pero lo soy sin querer.
Todos estos son seres humanos que me importan de forma completamente pura y genuina, con todos fui directa y honesta, porque con perra me refiero simplemente a que he hecho sufrir a muchos.

La perra sin corazón pero con corazón infinito volvió, perras!


Ya. El problema, es que ahora la perra no se acuerda de cómo socializar, y qué hago así?
Así no se puede perrear.
Pero me amo.

2.09.2017

Instante.

Lavaba mis dientes cuando empezó a sonar Flashed Junk Mind de Milky Chance. Recordé lentamente ese día en que tuve la casa para mi sola, allá en Dresden, y pensé: ¿en qué momento se me ocurrió lanzarme así?
Me inundó un sentimiento de angustia como nunca antes. No me quiero ir ¡no me quiero ir! Me enjuagué la boca y así como la pasta de dientes, se fue la angustia, y se cambió la canción.

Por suerte me dan estas cosas por tiempos cortos, igual como el amor por vos.

El amor.

Cada ciertos meses, en nuestra relación tan extraña, me dan ganas de verte. Igual como cada cierto tiempo nos dejamos de hablar, y después volvemos por otro medio, sin parar por otro mes.

Hoy me dieron ganas de verte de nuevo, me acordé de la plaza ñuñoa y tus historias de las mujeres locas. Me caes bien, y  a veces me gustas, pero más me gusta la idea que tengo de ti. Si alguna vez nos topamos por la calle, te invito a pasear, pero si no, no debería decirte nada. Al final siempre soy yo la que suspende, perdóname.

Al menos espero que disfrutes mi compañía virtual tanto como yo la tuya. Te diría que te quiero, pero a ti tampoco te conozco.